La mayoría de las mujeres simplemente se lavan la cara con jabón y ya está. Eso es perfecto, debemos hacerlo al menos por la mañana y por la noche, pero también es necesario hacernos una limpieza facial profesional al menos una vez al mes.
Esto es muy importante porque debemos limpiar los poros y la piel muerta de nuestro rostro, así conseguiremos que se oxigene mejor y nos ayudará a prevenir la aparición de arrugas, puntos negros y otros tipos de imperfecciones. No hace falta que vayamos todos los meses a un salón a hacernos la limpieza facial, ya que podemos hacerla en casa. Te damos unos pasos sencillos para que lo consigas.
Desmaquillá tu rostro completamente, usá leche limpiadora incluso si no estás maquillada. Después lavate la cara con un jabón para tu tipo de piel y aplicate tu tónico habitual con un algodón y a toquecitos.
Aplicate un exfoliante facial granuloso y masajeá tu rostro. Humedecé un cepillo facial y agregale una crema de limpieza. Cepillá tu cara en círculos, siempre de adentro hacia afuera y no te olvides del cuello. Lo retiramos con agua y volvemos a aplicarnos tónico.
El siguiente paso es el de vaporizar el rostro. Si no tenés un vaporizador facial en casa, tranquila, poné una olla con agua a hervir y, una vez lista, poné la cara encima (con cuidado de no quemarte). Tapate con una toalla para que no se escape el vapor.
Así conseguiremos abrir los poros y eliminar la suciedad del rostro será más fácil. Hacelo durante 5 y 10 minutos.
Elige una mascarilla adecuada para tu rostro. Hay de muchos tipos, relajantes, hidrantes... Dejala actuar alrededor de 15 minutos y relajate mientras la llevás puesta.
Después la retiramos con agua y con ayuda de una esponjita y volvemos a aplicar tónico.
Ponete tu crema hidratante y tu contorno de ojos.
Ya no hay excusas para lucir un rostro bonito, ahora ya sabes cómo hacerte una limpieza facial profesional en casa. ¿Vos también te la vas a hacer?